Telefarmacia, un fenómeno ‘nuevo’

La telefarmacia se conoce como aquel servicio basado en el envío a domicilio de medicamentos, con o sin receta médica, de forma rápida. Existe una distinción entre los fármacos que pueden vender las farmacias en su tienda online, de los del servicio de telemedicina. Éstos no dependerán del establecimiento, sino del transporte de los medicamentos desde la farmacia seleccionada hasta el lugar de residencia del comprador. 

El desarrollo de esta práctica, gracias a la digitalización, se ha extendido y desarrollado por la situación del momento producida por el Covid-19. Este ‘nuevo’ fenómeno, que crece a pasos agigantados, responde a la importancia de la sostenibilidad y al envejecimiento de la población.  

Según las últimas declaraciones del Instituto Nacional de Estadística y censo (INEC), Ecuador tiene 1,3 millones de adultos mayores en su población a finales del año 2020, esto es un 33% más de adultos mayores en comparación con la cantidad registrada en el censo realizado en el año 2010.  

Lo que quiere decir que 28 adultos mayores por cada 100 niños mayores de 15 años.  

Las herramientas o sistemas empleados en su desarrollo se enfocan en la monitorización de aplicaciones y webs, así como weareables o la robotización de videollamadas en la misma línea que la práctica de la telemedicina. 

Beneficios de la telefarmacia

• Número reducido de desplazamientos: será gratificante en el caso de que la persona no pueda compaginarlo con su horario laboral, viva en un entorno rural, presente un grado de movilidad reducida… La telefarmacia solventará con éxito los casos de urgencia que suelen ocurrir. 
• Uso fácil y accesible: su presencia en internet le aporta la posibilidad de ser ágil y rápido. Ya que puede ser también usado desde tablets y teléfonos móviles.   
• Envío rápido: su servicio 24 horas garantiza sus prestaciones en cualquier momento. Además, los envíos suelen efectuarse en menos de 1 hora.  

• Óptimas condiciones en el transporte: para los fármacos delicados o que requieren temperaturas especiales, la telefarmacia cuenta con los sistemas de transporte adecuados. 
• Individualización del enfermo: se podrá indicar el grado de intensidad de atención farmacéutica que precisan los usuarios. De este modo, los aciertos y la satisfacción del paciente aumentan. 

Desventajas de la telefarmacia

• Escasez de control: poca inspección en la dispensación de medicamentos a los pacientes. Existe cierto peligro relacionado con la venta de fármacos no autorizados. Esta desventaja va en la línea de la falta de leyes y reglas que controlen su ejercicio diario. 

• Desigualdad: hasta el momento, no todos los lugares han sido beneficiarios de la telefarmacia. Por tanto, existe cierta desigualdad en la sociedad. 

A modo de conclusión, la telefarmacia es práctica y necesaria, especialmente para las personas mayores o dependientes. Es el tipo de ayuda valorada cuando realmente se necesita. Sin embargo, sigue siendo importante insistir en la elaboración de una legislación específica que lo regule.